Aplauden el auge de las casa niño en Galicia: habrá 111 este año, y en Frades ya operan tres de estas 'guarderías' gratuitas

En unos días se abrirá la convocatoria para la puesta en marcha de ocho nuevos centros de este tipo

Ayudan a fijar población, a conciliar y también están generando empleos en el medio rural

Roberto Rey y Belén do Campo, a la derecha, en la visita a la casa niño Garatuxa en el Concello de Frades

Roberto Rey y Belén do Campo, a la derecha, en la visita a la casa niño Garatuxa en el Concello de Frades / Xunta

La delegada de la Xunta en A Coruña, Belén do Campo, acompañada por el alcalde de Frades, Roberto Rey, valora como “moi positivo” el balance de las casas niño, servicio de guardería pionero que Galicia comenzó a implantar hace ocho años “e que está a ser imitado por outras comunidades autónomas”. Lo hizo en la visita a Garatuxa, una de las tres que abren en el Ayuntamiento de Frades, aprovechando para recordar que en unos días se abre otra convocatoria para la puesta en marcha de 8 nuevos centros de este tipo, que aumentará hasta los 111 los existentes en Galicia.

La delegada recordó que recientemente se aprobó una inversión de 800.000 euros para financiar las obras de adecuación y el funcionamiento de las nuevas casas. Además, y como novedad, la convocatoria de este año incluye una ayuda complementaria de 150 euros semanales durante el tiempo que dure la baja de maternidad o paternidad de la persona encargada del servicio. Esta ayuda es para todas las casas niño, tanto las que se creen al amparo de esta convocatoria como las que ya están en funcionamiento.

Balance en el país

Galicia finalizará este año con 111 casas nido. Concretamente, en las comarcas de A Coruña, Barbanza, Santiago y Costa da Morte-Bergantiños están operativas en este momento 13 de estos servicios en los municipios de Frades (3), Dumbría, Irixoa, Toques, Vilasantar, Aranga, Paderne, Vilarmaior (2) y Santiso (2).

Durante su visita Belén do Campo hizo hincapié en las muchas ventajas que se derivan de la puesta en marcha de estas instalaciones gratuitas. Por una parte, ayudan a fijar población, al dar opciones de conciliación también en los ayuntamientos más pequeños y hacerlos, así, más atractivos; al tiempo que generan puestos de trabajo de los profesionales que las gestionan. “Queremos que a xente quede a vivir nos concellos do rural”, señaló la delegada, quien aseguró que, para eso, hay que apostar por ofrecer “servizos de primeira”.